La verdad que el nombre no se lo hemos puesto nosotros, ni viene de la receta original, que hemos sacado del blog de Webos fritos, el nombre se lo ha puesto nuestro hijo Hugo.
Hugo es un habitual colaborador de los bizcochos de la casa, el se acerca a la encimera su taburete y se sube en el, y va añadiendo todos los ingredientes según le decimos, y luego, después de verter la mezcla, lo repasa con el dedo, pero no suele comer el bizcocho horneado. Por primera vez ha devorado un bizcocho ya que éste le ha encantado y el nombre le ha puesto él: " mamá, es el bizcocho más esponjoso del mundo...." vamos que tenemos una receta de las fijas a partir de ahora ya que a nuestra celiaquina también le ha apasionado.
Como hemos dicho el bizcocho es una receta publicada en el mes de septiembre en el blog de Webosfritos, y nos encantó la idea ya que utilizamos habitualmente la leche evaporada y el resultado más que satisfactorio, nos ha encantado a todos y es muy muy esponjoso.
Ingredientes para un molde de unos 20 centímetros de diámetro (4 huevos medianos, 250 gramos de azúcar, 70 gramos de aceite de oliva suave, 200 gramos de leche evaporada, ralladura de 1 limón, 90 gramos de almidón de maiz, 80 gramos de almidón de yuca, 80 gramos de harina de arroz, 12 gramos de levadura tipo Royal, 1 pizca de sal, 1 cucharadita de goma xantana).
En nuestro caso hemos utilizado el molde de Bundt Cake de Nordic Ware que aunque es un pelín más de diámetro al no tener la parte interior vale perfectamente.
Precalentamos el horno a 170 ºC con calor arriba y abajo, engrasamos el molde con mantequilla. Separamos las claras y apartamos la yemas.
Montamos las claras con una pizca de sal a punto de nieve y apartamos.
Ponemos el azúcar y la leche evaporada en el bol de la máquina de varillas durante 5 minutos hasta obtener una crema con un cierto espesor, añadimos las yemas, la ralladura de limón y el aceite lo vamos echando poco a poco para que vaya integrando.
Añadimos el mix de harinas tamizadas, la levadura y la goma xantana, batimos hasta que esté mezclado.
Integramos con las claras a punto de nieve con una espátula muy suavemente, integrando poco a poco hasta conseguir una masa esponjosa.
Vertemos la masa en el molde y horneamos a la temperatura de 170ºC durante unos 35 o 40 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla con el molde, en el momento que temple, desmoldamos y espolvoreamos con azúcar glas.
Y el resultado es espectacular, muy esponjoso y que repetirás seguro.
Hola vale la yuca agria?
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